Conseguir una buena calefacción no depende solamente de adquirir uno u otro equipo que veas en el mercado. Ya que debes considerar muchos factores para obtener la sensación térmica perfecta en cada rincón de tu casa.
Dentro de esos detalles: lo esencial es el tamaño del área que vas a calentar.
No obstante, a veces las personas se apresuran y eligen el primer sistema de calefacción que ven, y casi siempre terminan llevándose una gran decepción.
En este sentido, una chimenea eléctrica es una buena alternativa, porque ofrece estética, versatilidad y se consigue a buen precio. El problema está en saber cuántos metros cuadrados calienta una chimenea eléctrica.
Para ayudarte, en este artículo encontrarás todas las características de las chimeneas eléctricas, incluyendo la superficie que puede calentar, según la potencia del equipo. Así sabrás por qué son ideales para usarlas como equipos complementarios de calefacción.
Contenido
Lo primero que debes saber es que las chimeneas eléctricas son artefactos decorativos que buscan mantener la arquitectura y la función de las antiguas chimeneas de leña, sin las incomodidades del humo, la recarga de madera o el olor que generan los fogones comunes.
Sirven de apoyo a otros sistemas de calefacción. Además, las pueden conseguir en distintos modelos y tamaños, por lo cual combinan muy bien con cualquier estilo de decoración.
Uno de sus principales atractivos es que cuentan con simulación de llamas. Esto hará que pases horas observando el fuego artificial para relajarte y, a la vez, calentarte. Ya que tienen un hipnótico efecto visual que se logra a través de una iluminación LED.
En definitiva, son equipos que dan la sensación de tener una chimenea real en tu propia casa.
Ahora, antes de entra de lleno en el funcionamiento de las chimeneas eléctricas, es conveniente analizar algunos detalles esenciales en este artefacto:
Funcionamiento | Pueden calentar por medio de un mecanismo de resistencias que generan aire caliente cuando están conectadas a una fuente de electricidad. |
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Consumo | Tiene un consumo moderado o alto de luz. Esto depende de si solo las utilices como calefactor o con el efecto adicional de las llamas flameantes. |
Espacios que puede calentar | No son buenas para grandes espacios. Lo más recomendable es que se usen en habitaciones de unos 30 m2 o menos. |
Tipos | En el mercado existen las chimeneas eléctricas encastrables y las móviles. |
Funcionalidades adicionales | Dentro de las funcionalidades adicionales, se encuentran: efecto fuego, cama de cenizas, programación de termostato, sonido del fuego, luces de colores, entre otros más. |
Las chimeneas eléctricas no necesitan ningún tipo de combustible para funcionar. Solo requieren de una toma eléctrica para empezar a trabajar, por lo que no generan humo, ceniza ni olores molestos.
Esta característica hace que sean dispositivos perfectos para colocarlos en cualquier inmueble.
Su carcasa imita la forma de las chimeneas tradicionales. En donde algunas hasta cuentan con la imitación del tronco de leña y de la cama de cenizas.
Uno de los principales detalles de estos dispositivos es que su mecanismo se basa en la creación de llamas hiperrealistas que imitan el fuego, pero sin producir la combustión.
Esto ayuda a obtener una buena sensación térmica, pero con el beneficio de observar la emulación del fuego; lo que da una sensación muy relajante.
Dado que en un principio fueron diseñadas solo como un elemento decorativo, hay que aclarar que no todas las chimeneas eléctricas que existen en el mercado incluyen la función de calor. Por lo tanto, este es un detalle al cual debes estar muy atento.
Las chimeneas que pueden calentar el ambiente funcionan por un mecanismo de resistencias y ventiladores que emiten un flujo de aire caliente hacia el exterior.
No obstante, la función calorífica de este aparato no sustituye a un sistema de calefacción. Es por esto que las chimeneas eléctricas por sí solas no sirven para calentar una casa o un espacio muy grande.
En cuanto a su forma, se encuentran dos tipos de chimeneas: las encastrables y las movibles. Estas, a su vez, pueden ser con calefactor o sin calefactor.
En ambos modelos la potencia de su resistencia es variable, así como las funciones que pueden integrar.
La capacidad calorífica de las chimeneas eléctricas depende directamente de la potencia que tenga el aparato. Lo que sí es cierto, es que nunca calentarán igual que una chimenea de leña.
Para empezar, estos dispositivos no suelen superar los 2.000 vatios de potencia. Si tomamos ese ejemplo, podemos decir que va a consumir la misma cantidad de electricidad y que generará unos 2 KW de calor útil.
En otras palabras, para poder calcular el calor que puede aportar una chimenea a determinado espacio hay que multiplicar los metros cuadrados del área por 100 W. Toma en cuenta que la potencia necesaria para poder calentar 1 metro cuadrado es de entre los 80 W a los 100 W.
Entonces, si una habitación es de unos 20 m2, se van a necesitar aproximadamente 2.000 W de potencia para que se pueda calentar con eficiencia.
El problema está en que las personas instalan las chimeneas en salones muy grandes que sobrepasan los 30 m2, y eso causa que no sean suficientes para calentar todo ese espacio.
En resumen, estos son equipos diseñados principalmente con fines decorativos y que solo sirven para calentar habitaciones pequeñas de hasta máximos unos 25 metros cuadrados.
Como puedes ver, las chimeneas eléctricas funcionan como un sistema de calefacción complementario que sirven para ayudar a otros calefactores. Pero también le agregan un bello toque decorativo a cualquier lugar.
Además, su uso ofrece muchas ventajas y desventajas como las que veremos a continuación:
Recuerda que para elegir una buena chimenea debes considerar cuántos metros de habitación vas a calentar, la potencia del aparato y la estética de tu diseño decorativo. Si haces esto, vas a tener un equipo que será tu mejor aliado en los días más fríos del invierno.